EL KUNG FU SEXUAL

El Kung Fu sexual, al igual que el sexo tántrico tiene una visión en la que la conservación de la energía sexual se considera muy importante para estar saludable y el verse espiritualmente. Considerando que esto es posible solo por medio del trabajo energético que repercute en la consolidación  y el incremento de éste flujo.

El Kung Fu también coincide con el tao y con el tantra  en cuanto a los llamados “Dos Caminos”  “La vía2 y “La Otra vía”, “El camino de la mano derecha”, El camino de la mano izquierda”, los primeros trabajan el ascetismo  creyendo en el ascender  de la energía,  mientras que los segundos lo hacen  a través de la sexualidad trascendiendo la dualidad y logrando la integración de lo masculino con lo femenino.

Reconoce como fundamental comenzar con un trabajo de evolución energética individual para posteriormente poder hacerlo en pareja. En la técnica del Kun Fu sexual se trabaja logrando que la energía  suba desde los testículos u ovarios a través de la columna vertebral para que llegue al cerebro, una vez allí, comienza a bajar por la zona delantera del cuerpo, pasando por la garganta, el corazón y el plexo, tanto el recorrido trasero como delantero tienen su culminación en la lengua.

Afirman que es diseminada por el cerebro y la glándula pituitaria y que además es una energía sumamente asimilable. Es un circuito energético que se lleva a cabo con el fin de estimular el sistema endocrino, proporcionar vitalidad a todo el cuerpo propiciando estados de autocuración de forma natural.

Se utiliza la respiración para hacer distintos tipos de meditaciones, para que la circulación fluya de forma natural, también aconsejan visualizar de forma mental este fluir de la energía en el interior del ser,  recorriendo el circuito de  los distintos centros energéticos antes mencionado. Es probable que las primeras veces no se sienta nada al practicarlo, pero con la constancia  poco a poco se comienzan a diferenciar partes del cuerpo en las que se percibe calor.